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Misioneros franciscanos al servicio
de la Tierra Santa
La fiesta de San Francisco de Asís en Jerusalén es muy similar de un año a otro… ¡pero este año no será así!
De hecho, por una coincidencia entre el calendario gregoriano y el judío, en este año 2014, la fiesta del fundador de los hermanos menores, celebrada el 4 de octubre, coincide con la fiesta judía del Gran Perdón, Kipur, el 10 del mes de Tishrei. Es un acontecimiento excepcional, que se ha repetido solo dos veces desde 1900: en 1976 y en 1995.
Pero todavía más excepcional es la coincidencia de estas dos fiestas con la musulmana del Eid al Adha (la fiesta del Sacrificio), que cae el 9 del mes de Dul Hiyya según la Hégira.
La coincidencia entre el Eid y Kipur es más frecuente. El acontecimiento se reproduce generalmente dos veces, en un lapso de tiempo de dos o cuatro años, alrededor de cada 30 o 40 años. Así, en 2014 y en 2015, las festividades de Kipur y del Eid caerán en el mismo día. La última vez que se produjo fue en 1981 y 1983, y anteriormente en 1948, 1944, e incluso en 1885 y 1883 (véanse los convertidores de calendario ). Cuando los judíos empiecen la oración con un día de penitencia y expiación, los musulmanes conmemorarán el sacrificio de Ismael por parte de Ibrahim (Abrahán).
Sería motivo de alegría ver a tantos creyentes unidos en oración al mismo tiempo y en el mismo lugar si las dos tradiciones, judía y musulmana, no entrasen en un conflicto práctico. Así pues, mientras que Kipur es el día festivo del año más respetado por la población judía israelí durante la cual el uso de cualquier vehículo motorizado está formalmente prohibido (excepto por necesidad vital), los musulmanes tienen la costumbre de acercarse en peregrinación a la Explanada de las mezquitas, una costumbre que deberá enfrentarse a la clausura de los puestos de control entre Israel y los Territorios palestinos, pero también con el cierre de las carreteras limítrofes entre los barrios árabes y judíos de la ciudad santa.
El futuro nos dirá la naturaleza y la amplitud de las tensiones que todo esto podrá ocasionar.
Nosotros, los cristianos, estamos invitados en la fiesta del constructor de paz que fue san Francisco, a rezar para que él interceda por aquellos a los que quiso amar de igual manera.
Para facilitar que el mayor número de fieles posible pueda unirse a las fiestas franciscanas, la Custodia de Tierra Santa ha trasladado la fiesta de san Francisco, según el uso de la Iglesia, que ofrece tal posibilidad.
Si el Tránsito, es decir la conmemoración de la muerte del santo, se mantiene para el viernes 3 de octubre a las 17.30, durante las primeras vísperas de la fiesta, la misa festiva se ha trasladado a las 10.30 del domingo 5, en la iglesia de San Salvador de Jerusalén, cuando ya habrán terminado las restricciones al tráfico.
El 4 de octubre se mantiene otra fiesta custodial, la de la profesión solemne, la entrega definitiva, de fray David Grenier en la Orden de los Hermanos Menores, que se celebrará en la basílica del Santo Sepulcro, en el altar del Calvario, a las 7 de la mañana.
En cualquier caso, ¡el 4 de octubre será una fecha especial en Jerusalén!
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