jueves, 15 de marzo de 2018

114 AÑOS DEL CRISTO REDENTOR DE LOS ANDES QUE HONRA LA PAZ ENTRE CHILE Y ARGENTINA

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Redacción (Jueves, 15-03-2018, Gaudium Press) Hace 114 años, el 13 de marzo de 1904, fue inaugurado en la Cordillera de los Andes, en la línea de frontera entre Chile y Argentina, y a 3.854 metros de altura por el paso de Uspallata, una monumental escultura del Cristo Redentor, como símbolo de la paz entre ambos países.
Imponente y levantada en el cielo bendiciendo, así se ve aún este monumento, obra del escultor argentino Mateo Alonso, que se erigió como un homenaje al Papa León XIII, quien alentó la paz en el mundo.
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Cristo Redentor de los Andes / Foto: Andy Stuardo.
Bajo sus pies quedó consignada la siguiente frase: "Se desplomarán primero estas montañas, antes que argentinos y chilenos rompan la paz juradas a los pies del Cristo Redentor", pronunciada por Mons. Ramón Ángel Jara, Obispo de Ancud, Chile, el día en que se inauguró el monumento.
La historia del Cristo Redentor de los Andes se remonta al conflicto de límites que enfrentó a ambos países en la segunda mitad del siglo XIX. Las dos naciones sostuvieron acaloradas discusiones sobre cuáles debían ser los lugares sobre la Cordillera de los Andes en los que se marcarían sus límites.
Por seis años, desde 1898 hasta 1904, Argentina y Chile incrementaron sus armas bélicas, corriendo el peligro de desatarse una guerra entre las naciones hermanas, creciendo el rumor del inminente estallido de un conflicto, pese a los intentos de un acuerdo político entre los entonces presidentes de Chile, Federico Errázuriz, y Argentina, Julio Argentino Roca.
Paralelo a estos sucesos, al iniciar el siglo XX, el Papa León XIII dirigió al mundo varias encíclicas en las que rogaba por un mundo en paz, pidiendo una mayor devoción al Cristo Redentor. Una súplica que fue asumida por el Obispo de Cuyo, en Argentina, Mons. Marcolino del Carmelo Benavente, quien impulsó colocar en la frontera de ambos países una monumental estatua de Jesús Redentor para así recordar el mensaje de paz animado por el Santo Padre.
Para instalarla, el Obispo, quien también era dominico, hizo en el año 1900 una promesa pública de erigir la estatua, para lo cual animó una colecta. El prelado, consiguió bronce de antiguos cañones, encargando la escultura a Mateo Alonso, quien representó a Nuestro Señor con su pie derecho sobre el mundo, y una cruz levantada por su mano izquierda.
Tras algunos retrasos e inconvenientes, la imponente imagen fue trasladada desde Buenos Aires hasta la Cordillera, para ser inaugurada el 13 de marzo de 1904 con la presencia de topas chilenas en el lado argentino, y tropas argentinas en el lado chileno.
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Día de la inauguración de la monumental escultura fronteriza / Foto: Dominio público.
A este Cristo Redentor se encomendó la paz de ambas naciones, la cual se vio nuevamente amenazada en 1978 por el conflicto del Canal de Beagle; pero gracias a la mediación del entonces Cardenal Antonio Samoré, quien fue enviado por el Papa para intervenir en el conflicto a finales de ese año, la paz regresó a ambas naciones, un hecho que quedó consignado unos años después con el "Tratado de Paz y Amistad", firmado por los dos países en 1984.
San Juan Pablo II, cuando visitó Argentina en 1987, y en un breve paso por Mendoza, dijo sobre la monumental escultura: "El monumento a Cristo Redentor, inaugurado hace más de ochenta años, como símbolo de paz entre argentinos y chilenos, está enclavado en lo alto de la Cordillera, desde donde vigila y despliega su providencia protectora sobre ambos pueblos hermanos. Ha sido Él, tenedlo por seguro, quien ha velado siempre, y de modo particular en estos últimos tiempos, para que se cumpla la hermosa leyenda allí estampada: ‘Se desplomarán primero estas montañas antes que argentinos y chilenos rompan la paz jurada a los pies del Cristo Redentor'".
Con información de Aleteia y Vatican.va.



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