Lo fácil, lo cómodo o lo inteligente para la mayoría sería no hablar ni escribir más del tema en cuestión donde en el día de hoy se está derramando ríos de tinta en uno u otro sentido.
Más de uno podrá decir que las reflexiones y opiniones personales que aquí van a quedar patentes son, no sólo, política sino socialmente incorrectas toda vez que la mayoría del pueblo ya ha asimilado la situación dentro de la "normalidad" que parece haberse instaurado en nuestra querida España desde hace algunos años ya.
Me estoy refiriendo al fallo del Tribunal Constitucional sobre la Ley de Matrimonios Homosexuales. Solo me referiré a dicho fallo porque al marco jurídico-constitucional del mismo ya lo conoceremos dentro de unos días cuando se haga público por parte del Alto Tribunal.
Podría hacer mención, sin entrar en los fundamentos de mi fe católica, a la Ley Natural o demás concepciones del término matrimonio, pero no, hoy a escoger explícitamente lo que dice la Real Academia de la Lengua:
Matrimonio:
1.- Unión de hombre y mujer mediante determinados ritos o formalidades legales.
En el Catolicismo es el Sacramento por el cual el hombre y la mujer se ligan perpetuamente con arreglo a las prescripciones de la Iglesia.
Estos conceptos diferenciados nos lo ofrece la Real Academia de la Lengua que son los garantes de la gramática española.
Por todo cuanto he publicado hoy en este blog podéis imaginaros que no estoy de acuerdo con dicho fallo porque, creo, que transgrede el término de matrimonio, su origen y finalidad. El matrimonio es la unión entre un hombre y una mujer. Eso es lo natural porque el fin del mismo es la procreación, es decir dar vida y perpetuar la especie. Estamos observando con bastante preocupación los ínfimos niveles de natalidad en España y en el mundo y como eso puede afectar al desarrollo económico y social de sus habitantes.
Pero, lo que no estoy de acuerdo es que las uniones entre homosexuales y lesbianas tengan el carácter de matrimonio porque no se ajusta al origen, a lo que fundamenta al mismo.
Esto no es óbice para sí estar de acuerdo con otras formas y conceptos legales a estas uniones que garanticen la total cobertura de los derechos sociales y económicos de las parejas del mismo sexo que se hayan unido legalmente. Lo que difiero, como difieren una parte importante de los españoles, es en el concepto de dotar a estas uniones del carácter y el término de matrimonio.
Esta es mi opinión, tan respetable como las que no piensan de la misma manera. La democracia es eso; el aceptar, comprender y respetar todas y cada una de las opiniones aunque no estemos, en absoluto, de acuerdo.
Si les digo la verdad no esperaba otra cosa que lo que ha hecho el Tribunal Constitucional. Este Alto Tribunal ha perdido totalmente el crédito con sus decisiones y con su entreguismo al Poder Político. El Tribunal Constitucional que debería ser la voz más autorizada pues sus miembros deberían ser los verdaderos garantes de la Carta Magna, tendría que ser un órgano totalmente independiente y formado por los más prestigiosos y formados jurístas del Estado.
Los actuales miembros del Tribunal Constitucional son los principales culpables de que los pro-etarras estén, ahora mismo, en todas las Instituciones del Estado y de los cuantiosos ingresos que perciben Bildu y compañía de todos los españoles, también de las víctimas del terrorismo que amparan, defienden y protegen.
Esta misma tarde hemos podido comprobar como el Ministro de Justicia, D. Alberto Ruíz Gallardón ha dicho que el PP no va a modificar dicha Ley después del fallo del Tribunal Constitucional. Podrían hacerlo porque gozan de una amplia mayoría absoluta, pero este gobierno no está para estos menesteres.
La "famosa" política de ingeniería social de Rodríguez Zapatero se ha ido introduciendo en todos los poros de nuestra Sociedad haciendo ver como normal lo que es un ataque a la base fundamental de la misma: La familia. Leyes como el matrimonio homosexual, el divorcio exprés, la Educación para la Ciudadanía, el aborto, etc., han ido transformando los valores propios en simples conceptos. Esta ingeniería social la está permitiendo con su actitud el Gobierno del Partido Popular de Mariano Rajoy. Después de un año de las elecciones generales en las cuales los españoles le entregamos las llaves y el llavero para que gobernara con criterio España nos damos cuenta que ¡TODO SIGUE IGUAL O PEOR!
Un Tribunal Constitucional y un Consejo General del Poder Judicial politizados lo que crean es desconfianza y rechazo por parte de los españoles de a pie.
Debo decir, para terminar, que acato el fallo del Alto Tribunal aunque no comparta con él sus motivaciones ni sus objetivos, aunque difiera totalmente con el mismo y lo ponga públicamente de manifiesto.
Toda ley se puede cambiar, para hacerlo solo hay que tener voluntad y estar respaldado por una amplia mayoría parlamentaria y social. Pero la para cambiar las cosas hay que tener voluntad y querer y eso es lo que parece que aquí falla.
Esta mañana hablando con un amigo mío de este tema, conversando animadamente de lo que está sucediendo en España y en el mundo, y estando los dos de acuerdo con la opinión del otro, le dije para finalizar lo mismo con lo cual voy a concluir este post: Mi querido amigo: ¡Entre masones anda el juego!
Jesús Rodríguez Arias
Estoy totalmente de acuerdo, NADA HA CAMBIADO en el proyecto de ingeniería social de Zapatero, o de Obama, o de Rajoy, yo creo que es el encargado de "domesticar" a la derecha, es un juego siniestro con esta sociedad: los socialistas traicionando la patria, a los obreros, y ahora la derecha, parece como si una mano poderosa rigiera según le conviene hasta ir igualando a la izquierda y la derecha hasta hacerse con el poder total (mundial) definitivo sin disimulos....fantasías?
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