2012-11-08 L’Osservatore Romano
«Es verdad que nuestra Orden tiene 500 años, pero pensamos que nuestra misión todavía hoy es actual y queremos, por lo tanto,
reforzarla para el futuro, actualizarla, hacerla aún más presente y sobre todo hacerla llegar a todos los pobres y necesitados: esta es nuestra gran prioridad». Fray Jesús Etayo Arrondo, elegido prior general de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios el 1 de noviembre, explica así el objetivo principal individuado en el curso del capítulo general, o sea, el de seguir viviendo el carisma y la misión de la hospitalidad.
«La colaboración de los laicos en la Orden es una realidad consolidada y fundamental -dijo el superior general en una entrevista a nuestro periódico-. Debemos todavía reflexionar sobre algunos argumentos, confrontarnos, pero lo que queda claro es que la formación es la clave para la transmisión de los valores de san Juan de Dios. Nuestros colaboradores no sólo deben conocer sino también entender y asumir los principios, los valores y el carisma de nuestra Orden religiosa porque son ellos los que cada mañana y cada día asisten a las personas que se dirigen a nuestras estructuras hospitalarias. Quisiéramos decirles que son, como dice el Papa Benedicto XVI, “no sólo colaboradores, sino verdaderos corresponsables de la misión hospitalaria en la Iglesia”».
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